Apple puede darle a Goldman la oportunidad de posicionar su negocio de banca de consumo.
La nueva tarjeta de crédito de Apple no es particularmente innovadora para los estándares de la industria. Pero para Goldman Sachs, es un nuevo territorio y una bocanada para los bancos tradicionales que intentan permanecer relevantes para las nuevas generaciones.
Como muchas industrias, la banca ha estado atravesando una crisis de identidad dirigida por la tecnología, lidiando con el hecho de que se están convirtiendo en plataformas financieras invisibles en lugar de ser lugares físicos que vendían productos financieros al consumidor.
Bill Gates lo dijo de manera muy famosa en los 90’s “la banca es necesaria, los bancos no”
Esta profecía lentamente se convierte en realidad. El consultor de Publicis Sapient comenta: “En los últimos 5 años, los bancos han dicho repetidamente que las fintechs los des-intermediará relegándolos a mera infraestructura”
Apple Card es “el mayor paso que orilla a un banco a ser puramente un jugar de infraestructura”
La Tarjeta es una apuesta de lealtad de marca para Apple. No intenta competir con Chase o American Express. Al vincularse con Goldman, Apple quiere tener una relación seria con una institución financiera y llevarla con su base de consumidores —de la misma forma que Uber y Amazon están haciendo con Barclays y Chase.
“Hoy los bancos puede que no sean necesarios, pero los servicios bancarios lo son” dijo Craig Schachter de Finastra, una firma de software financiero. “Apple necesita probar a sus clientes que son capaces de proteger sus cuentas y activos de la misma forma que un banco probó hacerlo”
¿Qué hay para Goldman? El banco obtendrá todos los datos de los usuarios de Apple Card que ni Apple mismo tendrá acceso —y a cambio Goldman se comprometió a que la información no será vendida o compartida a terceros.
En 2016, Goldman lanzó Marcus, su unidad para ofrecer productos al consumidor final. Mientras otros bancos lanzaban iniciativas estrictamente digitales, han sido intentos fallidos para navegar los cambios culturales de los jóvenes usuarios de la banca.
A través de Marcus, Goldman ofrece préstamos personales y cuentas de ahorro de alto rendimiento así como planes de manejo de dinero y tarjetas de crédito. Marcus permanece hasta el momento separado de la Apple Card, la cual será llevará la marca de Goldman Sachs.
“Hay bancos para los cuales su marca es el banco, y harán lo que sea necesario para asociarse con las nuevas empresas tech”
Aun cuando Goldman Sachs nunca ha tenido una marca de consumo exitoso, la firma ha tomado pasos efectivos para rehabilitar su reputación : lanzar productos sin comisiones a través de Marcus y adquiriendo apps de manejo de finanzas como Clarity Money. Días antes del anuncio de Apple Card, Goldman anunció contrataciones de altas ejecutivas mujeres y puestos clave con personas afro-americanas. El mismo CEO de Goldman el mes pasado apareció como DJ en un evento del EDM.
Es un tiempo conveniente para que los bancos hagan el cambio de ser dueños de la relación con el consumidor a enfocarse a proveer mejor propuesta de valor tras bambalinas; las empresas Big Tech han demostrado ser eficientes a la hora de enfrentarse a los bancos “que son demasiado grandes para fracasar” y los cuales, para el consumidor, son muy fáciles de odiar.